2.4.Reflexión de aprendizaje: gusto, juegos, etiquetas, tipos de cocina...
Si la comida no solo entra por la boca
sino que también lo hace por los ojos, la nariz y el tacto podemos
afirmar que a los aromas y texturas también se unen los colores
elemento de satisfacción que podemos utilizar como gancho para
iniciar a los pequeños como auténticos cocineros, así la variedad
de frutas y verduras permitirá a los niños acercarlos a comer bien
a través del juego siendo conocedores de las propiedades de los
alimentos según su color. Comer bien es comer de todo en su justa
medida, una correcta alimentación en la infancia sentará las bases
alimenticias en un futuro y ayudará a proteger a nuestros pequeños
de posibles enfermedades.
El conocer las etiquetas alimenticias
ayudará a los niños a tomar decisiones saludables desde una
temprana edad, estas proveen información básica de los nutrientes
de los alimentos para que los jóvenes empiecen a valorar los
diferentes tipos de alimentos y lo que nos aportan. Les podemos
sugerir que traigan ejemplares de etiquetas alimenticias de lo que
han comido en casa y a partir de estas generar una conversación en
clase extrayendo conclusiones sobre el contenido de las mismas que a
su vez podemos extrapolar al ámbito familiar para hacer conscientes
a los padres-madres de la importancia de una correcta alimentación,
todo ello unido a los juegos sobre alimentación y sus nutrientes
acercarán a nuestro alumnado a un conocimiento más real y
consciente de su alimentación.
Por otro lado la variedad de opiniones
y argumentos razonados sobre cocina tradicional y moderna ha servido
para acercarnos un poco más a las peculiaridades de cada una
valorando la importancia de que ambas pueden y deben subsistir
teniendo siempre como referente unos platos saludables y
nutricionalmente completos.
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